Teniendo en mente, desde hace bastantes días, de subir una imagen del Petirrojo, ya hecha desde diciembre, pero las cosas que me pasan..., de dejarlas para mañana.
Erithacus rubecula, mostrando éste, su vivo anaranjado, galán y afable, se deja querer por el fotógrafo, y con su mirada de confianza, posando una y otra vez, siendo fiel a su trocito de parcela, a la que defiende encarecidamente de sus propios congéneres y de otros, enseñando su llamativo pecho primero, y luego lanzándose al ataque, sobre todo con los Colirrojos, a los que mantienen bien alejados.
Numerosos son estos invernantes que nos acompañan, siendo los primeros a los que escuchamos, y también los últimos, al caer la noche.
Por si alguien tiene ganas, muchas ganas de leer más sobre los Petirrojos y saber de sus curiosos lugares para anidar, recomiendo esta dirección. http://www.pajaricos.es/mas/maspetirrojo.htm
Petirrojo, Erithacus rubecula.
Canon Eos 40D, EF 100-400 f/4.5-5.6, 1/320,f/7.1, 400 iso.
© MCabalga
Precioso peti Manuel, no por ser muy común es menos hermoso!!
ResponderEliminarun abrazo
Un placer el ver que has iniciado un blog...donde poder ver tus trabajos...seguiré haciéndolo.
ResponderEliminarManolo: el Petirrojo es sin duda uno de los más bellos pájaros de nuestros campos. Grácil, de grandes ojos negros... Le has pillado en una pose realmente bella. Un saludo.
ResponderEliminarHola Manuel, te ha quedado genial, esa pose y esa mirada están fenomenal. Lo que ya te he dicho, estás hecho un buen pájaro, digo pajarero.... Un abrazo.
ResponderEliminargracias Manolo , es un placer recibir mensajes.
ResponderEliminarLos petirrojos son la compañia del bosque, siempre amistosos y proximos.. muchas veces muevo un poco el suelo cerca de donde estoy instalado para hacer fotos y en poco tiempo ya vienen a visitarme...son un encanto....saludos y un fuerte abrazo